martes, 30 de diciembre de 2014

¡Que los niños se muevan!

Mucho se especula que la tecnología mediante los aparatos como tablet computadoras, vídeo juegos han disminuido los movimientos corporales, ejercicios y juegos al aire libre en los niños. Muchos niños de ahora ya no realizan  juegos del tipo Yas, Trompo, el juego de bolitas o “ñocos”, Mundo etc. Estos juegos se componían de una topografía de conducta que involucraba el desarrollo de la coordinación viso motriz, la atención y la concentración, movimientos derecha – izquierda, cambios de saltos de un pie a otro, resistencia y relaciones sociales en donde los niños aprendían a ganar y también a perder y ser tolerantes entre sus grupos de pares.

Los movimientos se hacían en grupos de niños en donde la imitación era importante para aprender y ganar experiencia, esto y los movimientos corporales al aire libre en familia han sido  sustituidos en muchos hogares por movimientos de los dedos en solitario en los vídeos juegos, la televisión, el facebook o el chat y otros que por su tecnología permiten al niño aislarse en su cuarto  sin necesidad de la interrelación social.

La tecnología es buena, ese no es el problema, pero sí lo es, que los padres hayamos dejado (me incluyo, nobleza obliga porque soy padre) que invada el desarrollo de los movimientos habilidades y destrezas de nuestros niños.

Los juegos de la calle arriba mencionados desarrollaban destrezas y habilidades que después le servían a los niños para los juegos en sociedad, ayudaban también a madurar las emociones, enfrentarse con los retos ganar y perder. Ahora los niños tienen problemas en los juegos que involucren movimientos viso-espaciales y dominios corporales de los miembros superiores e inferiores como el fútbol  o basket; etc, como fallan en los movimientos sienten vergüenza ante sus pares de amigos, evitando las situaciones de esos juegos, volviéndose tímidos y solitarios, creyendo que el dominio de un movimiento en especial como fútbol o tenis se debe porque “se ha nacido con esa habilidad”.

Lo cierto es que la experiencia o la conducta experta de algunos movimientos o grupos de movimientos se desarrollan con la exposición constante y reiterada a ese ambiente y a ese movimiento. Si el niño repite esa exposición y es reforzado positivamente  ganara experiencia y la sensación que si puede, tomara confianza, podrá enfrentarse en el futuro a nuevos problemas, perderá la timidez hacia cosas nuevas.
Hay formas diversas para que el niño pueda volver a desarrollar los movimientos físicos y viso-espaciales, salga a jugar al parque, a que salte en un pie, a que tire y reciba el balón, a que se esconda o tire la bola a un tumba latas, no cuestan dinero, pero si tiempo y esfuerzo, si Ud trabaja toda la semana, dedique los fines de semana a los juegos recreativos en los niños, ademas ellos y Ud regularan su  estrés.


lunes, 8 de diciembre de 2014

SOCIEDAD “ENFERMA”

A menudo  salen expertos a decirnos que nuestra sociedad está “enferma”, crímenes pasionales, falta de valores, violencia, narcotráfico, familias desintegradas, robos etc. Tendemos a creer también que somos la única sociedad que sufrimos de esa “enfermedad”, sin caer en la cuenta que el mismo diagnóstico se da en muchos países, ya que las sociedades en general comparte alguna características comunes, por ejemplo la familia como factor de educación, la religión, Derechos Humanos, la moral, etc., y tienen los mismos problemas, mayores incluso que los nuestros. Otras sociedades tienen menos problemas sociales que nosotros, han evolucionado en formas y prácticas sociales que permiten a sus ciudadanos ejercer conductas positivas como la educación, respeto, competición, libertad, cooperación, etc.

Además de las conductas sociales indicadas que caracterizan a una  sociedad “enferma”, tenemos para añadir la presencia de depresión, problemas psicofisiológicos,, ansiedad, estrés, violencia de género, maltrato a los niños, a los animales y demás manifestaciones que se conocen como trastornos psicológicos. En la niñez problemas escolares, deserción escolar,  bajas notas, acoso escolar, estrés. etc.

Pero al leer el término de  sociedad enferma la mayoría pasa del conjunto al individualismo ciudadano, particularizan el trastorno perdiendo de vista el papel de las variables ambientales que interactúan con el organismo, que es otra forma de decir sociedad o cultura. Skinner decía que una sociedad “Es un conjunto de contingencias de refuerzo, mantenidas por un grupo, posiblemente en forma de leyes o reglas, presenta una dimensión física definida  y  su duración es superior al del grupo que la conforma, un patrón que puede cambiar, modificar o suspender sus prácticas, y sobre todo el poder. Una cultura así definida controla  el comportamiento de los miembros del grupo que la práctican.” * Skinner no se refiere al control por el control, ni a una dictadura, si no al control de las contingencias que regula la conducta de los ciudadanos.

Las sociedades y los Estados por lo general, a pesar de los esfuerzos que hacen en organizarse, parece que no tienen un plan definido, un patrón estable de organización que permitan la libre competencia, el refuerzo contingente a la conducta pro social de los ciudadanos. El simple dictado de leyes no basta, falta la efectiva aplicación de estas.

Las sociedades han formado aleatoriamente formas de conductas reforzantes y   satisfactorias sin ningún orden para los ciudadanos, por eso, para algunas personas la vida es hermosa, para otros una tragedia. La desesperanza que caracteriza a una sociedad “enferma” no es otra cosa que falta de reforzamiento traducida en oportunidades de competencia hacia la consecución de objetivos  para todos los ciudadanos, no para unos cuantos de acuerdo al apellido, condición social o raza.

¿Acaso la depresión no es una falta de reforzamiento a conductas satisfactorias? ¿Acaso la desesperanza no se da por que la persona  tiene objetivos en el futuro que sabe que le serán difíciles de alcanzar? ¿El esfuerzo es bien recompensado? Cuando la persona se esfuerza un tiempo y no ve logros, y si no ha sido formado hacia otras satisfacciones pro sociales vendrá la desesperanza y la depresión. El esfuerzo no puede durar eternamente. ¿Qué cosa es sino la falta de valores, sino la escasa satisfacción  que se consigue por conductas que den bienestar a muchos? ¿Acaso la corrupción no es conductas organizadas por un grupo dirigidas hacia la autosatisfacción en perjuicio de los demás? Cuando el que gobierna  lo haga con el concepto de bienestar para todos,  la sociedad “enferma” no será tal, sino una sociedad que refuerce la conducta pro social, una sociedad que el que trabaje progrese, una sociedad que aplique consecuencias inmediatas a conductas inadecuadas, que castigue menos también  y premie mas la conductas de progreso, libertad y cooperación.

Si vemos la sociedad “enferma” en cada individuo no avanzaremos en nada. Para el análisis conductual la sociedad no está “enferma” por eso en todo el articulo puse la palabra entre comillas, si no que, no aplica de manera adecuada los principios que forman la conducta humana positiva, esas que llamamos, pro sociales, libertad, decisión, cooperación, competitividad, bondad, honradez, decencia, etc y  cuando las aplica lo hace sin saber y de manera aleatoria, no contingente y no arbitraria, que llega a pocos, no a la mayoría.


*Skinner “Sobre el Conductismo”

sábado, 18 de octubre de 2014

¡No reflexione tanto!

Para Unamuno el hombre por ser hombre y tener conciencia era ya, en comparación con el burro y el cangrejo, un animal enfermo. La conciencia para él era una enfermedad. Esto lo decía en el marco de que el hombre al tener conciencia, vivía en perpetuo sentimiento trágico de la vida, buscando un porque a todo lo que hay en este mundo.

La reflexión es un pensamiento, y como tal, es una secuencia de conducta muy a menudo privada (solo el que piensa lo sabe) que transforma el ambiente para acciones nuevas y productivas, por esta razón reflexionar no es negativo, si va  orientado a lo nuevo y productivo, pero cuando se mueve como por un circulo vicioso que lleva al que reflexiona a sentir sensaciones y sentimientos desagradables es ahí en donde esta reflexión provechosa y muchas veces admirada se vuelve en una hiperreflexion  o reflexividad excesiva desagradable y tortuosa para la persona.

Hay persona que reflexionan mucho. Esto en vez de ser un atributo o característica positiva de la persona, puede volverse en contra de la tranquilidad del pensante. El sentimiento de culpa, el sentirse objeto social en observancia por los otros, la preocupación de no ser dañados, la seguridad, la tranquilidad, el desear caer bien a los demás, preocuparse si se pertenece al grupo etc, pueden hacer reflexionar a las personas hasta llevarlas a  sentir sensación desagradable de la que por lo general quieren salir, haciendo muchísimas cosas orientadas a evitar esa experiencia de la reflexión, muchas veces estas actividades que hacemos para evitar la experiencia de sentir cosas desagradables nos mantienen  en el problema porque son reforzadas negativamente ejemplo: Iré a la fiesta esta noche, porque no soporto estar solo en casa”  esto podría repetirse todas las semanas, por no querer afrontar la soledad.

Si Ud es una persona que reflexiona mucho sobre las cosas y esas reflexiones le hacen sufrir a tal punto que no lo soporta,  tal vez es hora de hacer una diferenciación entre Ud y sus pensamientos, ponerlos al mismo nivel categorial  que Ud, es decir, sin caer preso de esas reflexiones, sin sentirse que Ud mismo es lo que su reflexión le dicte. Obviamente sus pensamientos los tiene Ud no otra persona, pero tampoco nadie es siempre lo que sus reflexiones le dicen. Los recuerdos, las creencias y lo que uno piense no es un problema “per se” no debe serlo, no es uno de su atributos, nadie es malo siempre, ni bueno siempre, nadie es feliz siempre ni infeliz toda la vida.

 Esas sensaciones desagradables que le dan esas reflexiones no pueden ni deben limitar su conducta hacia nuevas formas de sentirse bien o cumplir con su trabajo o actividades diarias, son parte de la vida, de la existencia y hay que aceptarlas de esa manera, sin luchar con ellas.


domingo, 12 de octubre de 2014

Aplicación de la técnica de la Extinción

De nuevo, si la extinción es una técnica que consiste en principio, no reforzar más la conducta que ha sido previamente reforzada ¿Con quienes podríamos usarla sin problemas?. A ver la situación de la extinción es como sigue: Si un niño pide una golosina insistentemente por que aprendió que si reitera su pedido este se le dará, la extinción seria no dárselo bajo ninguna circunstancias, así en igualdad de condiciones, cada vez que pida golosinas no se le dará, tendera en un principio a aumentar el pedido pero tendera también a dejar de pedirlo. Si un trabajador pide una cita con su jefe para que le aumente el salario y este nunca se lo da, dejara de pedirlo. Si un jugador de maquina tragamonedas está en una maquina que ha sido programada para que no le de ninguna ficha, el jugador tendera irse o dejar de jugar en esa máquina, se aplico la extinción.


Siendo una técnica utilizada para disminuir conductas, es lo opuesto al reforzamiento, por lo tanto y en otras palabras, si no está combinada con otras técnicas, resta oportunidad para que la persona a quien se le aplique, aprenda nuevas conductas, también y como ya se dijo resta estimulación por lo que podría aplicarse a niños y adultos muy extrovertidos con buen autodominio y reflexivos por que percibirán claramente que no serán atendidos. Su aplicación en niños hiperactivos por ejemplo llevara un poco más de tiempo su efectividad por que estos tienden siempre a distraerse fácilmente y buscaran por otros medios satisfacer su petición., no captaran  muy fácil el mensaje de que no se le dará su petición.

Aplicación más efectiva del castigo

Los que leen habitualmente este blog, saben que durante la explicación que hemos hecho de las diversas técnicas de modificación de conductas hemos escrito que el castigo es una de las últimas técnicas que hay que aplicar cuando se quiere modificar la conducta en niños o adultos, cuando las demás técnicas no dan resultados por problemas de implementación, mal aplicación etc. y solo cuando la conducta problema lo justifica por su intensidad o peligrosidad se debe aplicar el castigo. Aun así y aunque pocos gusten del castigo, no somos ingenuos para pensar siquiera que el ser humano no  necesita del castigo para la eliminación rápida de la conducta problema, más aun, y será más efectivo si va combinado con otras técnicas y se reduce al mínimo la posibilidad de que el castigado reciba alguna clase de reforzamiento. Una de las causas de que el castigo muchas veces no funciona es que va seguido de reforzamiento  en circunstancias que no podemos controlar.

Ahora bien, la aplicación del castigo, si es reiterado puede influir sobre las emociones y afecto, de hecho, las personas que presentan depresión es porque han estado expuestas a escaso reforzamiento, han recibido castigo permanente o han experimentado perdidas constantes de reforzamiento.

Si se le aplica un castigo a un niño o adulto con depresión agravaremos su situación, si le aplicamos a los “sumisos”  aceptaran el estimulo aversivos sin problemas, perdiéndose la efectividad y el principio del castigo, y si le aplicamos el castigo a una persona con mucho autocontrol no conseguiremos mucho éxito porque podrá soportarlo sin problemas.

El castigo será más efectivo si se les aplica a niños y adultos con estabilidad emocional porque soportaran más lo adversivo sin que le choque emocionalmente. También se le puede aplicar a personas con mucho dominio porque sentirán lo adversivo de la técnica  sin tener eso que significar que pierdan el control de su vida.

Es mucho mejor aplicar el castigo controlando las consecuencias que lleva esta técnica. 

viernes, 3 de octubre de 2014

Refuerzo positivo y alta autoestima

Muy bien, de nuevo, si el refuerzo positivo eleva o mantiene los eventos internos como la autoestima o la estabilidad emocional ¿puedo aplicar un programa de refuerzo a alguien con autoestima alta?; la pregunta es válida dentro de un análisis conductual. Parece que no tendría mucho sentido reforzar a Juanito un alumno que habla en clase cuando no debe, para que aumente la conducta de escribir durante la clase, si al momento de hacer bulla ya tiene la atención de sus compañeros y de la misma profesora ¿cuestión de la implementación  de la efectividad del reforzamiento? Puede ser. Sin embargo podríamos perder tiempo si Juancito ya esta reforzado por la clase hace mucho tiempo. Lo mejor sería  restarle los reforzamiento mediante un sistema de puntos cuando haga bulla. Lo que le costaría privilegios varios durante el recreo o algún tiempo de juego dentro del salón. Es más probable que Juancito aumente la conducta de escribir para evitar quitarle puntos., lo que aplicaría un reforzamiento negativo, (recuerde que el reforzamiento negativo es  la remoción de un estimulo adversivo-el quitarle puntos y privilegios, cuando la conducta que se quiere aparezca) puede ser sentido por la persona como un castigo, pero no lo es (el castigo es presentarle un estimulo adversivo, no quitárselo).

Si un gerente ofrece un bono a los empleados que lleguen temprano, existiendo ya la posibilidad de que los empleados hagan horas extras en donde pueden ganar más que el bono ofrecido tal vez no tenga mucho éxito. Es más probable que tenga éxito si implementa un  descuento de sueldo a los empleados que lleguen tarde. 

Debemos tener en cuenta que el reforzamiento puede llevar a la saciedad si no se varia de cuando en cuando, si esto ocurre no tiene sentido seguir reforzando, la persona dejara de hacer la conducta por que ya se sacio o ya tiene bastante reforzamiento que lo aburrió.


Este cobro de la respuesta es un enfoque positivo no intrusivo, y que no baja la autoestima a quien se aplica. Para que su aplicación sea efectiva se debe dejar que la persona tenga una reserva de puntos o estímulos reforzadores de donde restárselos. 

lunes, 29 de septiembre de 2014

Refuerzo positivo y auto estima baja.

Las técnicas de modificación de conducta y las terapias de  comportamiento son aplicables a todas las personas, niños y adultos, independientemente de los rasgos de  personalidad que muestran, aun así, algunas técnicas tienen mejor resultados que otras dependiendo de los rasgos del niño o del adulto. Dentro de las consideraciones éticas y del criterio para la aplicación de las técnicas de modificación de conducta se requiere que el analista y los padres del niño o el paciente,  acuerden que conducta se quiere incrementar o evitar. Pero existe un criterio que solo le corresponde adoptar al analista de la conducta basado en su experiencia, y es aplicar la técnica de acuerdo al  rasgo de personalidad del niño o del paciente esto con el conocimiento de que será  efectiva mas pronto y no será intrusiva para el cliente. Por ejemplo el reforzamiento positivo resulta  mejor en personas o niños “baja autoestima”, ya que reforzando la conducta mediante algún estimulo del cual sea causa, es más probable que los logros le darán la satisfacción que requiere la persona, ganando confianza elevando la  autoestima..

sábado, 20 de septiembre de 2014

autoinstrucciones

La mirada, el observarse unos a otros en una comunicación directa  de dos o más personas es considerada actualmente en nuestra sociedad un requisito en la relación de dos personas. Dependiendo de los usos y costumbre de la sociedad en que la persona se encuentra, es recomendable ver a los ojos a la persona con quienes conversamos, asintiendo con ellos de alguna manera lo que la palabra expresa; de hecho, es parte del entrenamiento de las llamadas conductas asertivas. Sin embargo hay personas que no miran al interlocutor, felizmente no es considerado un problema psicológico, y efectivamente no debería serlo, mas allá de lo que pueda decir la psicología barata y popular de que “los ojos son el espejo del alma” “…. son la ventana del alma”, o  que la mirada transmite algo, en verdad, la mirada no transmite nada ni es el espejo de nada, las personas que no miran a los ojos del interlocutor están a merced de interpretaciones antojadizas  como hipócritas, falsos o tímidos.

Aunque una mirada fija a alguien tampoco es bien vista, menos si viene de un extraño por la calle. Puede ser referida o circunscrita a una relación más intima, aunque en algunas partes y épocas no era así, Desde la antropología Sir James Frazer el famoso estudioso de la historia de las creencias y religiones de las sociedades antiguas, en la tercera edición en español del libro “La rama dorada” nos cuenta que en sus viajes se encontró con sociedades como la tribu Yuin de Nueva Gales en donde  la mirada entre ciertas personas estaba prohibido, específicamente el yerno estaba prohibido de mirar a la suegra, era presagio de mal matrimonio incluida la separación de su conyugue, tenía que dejarla si o si, no podía mirar a la suegra ni mirar en la dirección que esta veía. En las tribus de Nueva Bretaña conversar y mirar a la suegra era presagio de ciertas calamidades naturales, cosa que se resolvía con el suicidio de uno de ellos.

La mirada  sartreriana tiene un componente de invasión a la privacidad. Para Sartre, mirar al otro y recibir la mirada del otro, desnuda mi entera posibilidad de ser captado como todos mis defectos y me deja vulnerable en mi libertad hacia aquel que me envía la mirada, me vuelve objeto de experiencia del otro. Ocurre lo mismo si yo veo al otro.

San Agustín en sus “Confesiones”  en los capítulos del trigésimo sexto al trigésimo octavo cuando escribe sobre las formas de la “Tentation” (tentación) la mirada ocupa una de sus segundas formas, la primera es el placer. La mirada Agustina si es curiosa, deseosa de saberlo todo lleva a la persona al pecado y a caer en la tentación, de la que Agustín se libraba solo con fuerza de voluntad. Con estas ideas de las miradas a lo largo del tiempo  -entre otras que dejo a la investigación curiosa  no agustiana ni pecaminosa del lector -  no es extraño que le demos a la esquiva o fija  mirada una serie de interpretaciones desde las mágico-religiosas a las fenomenológicas o experencial, perdón por el barbarismo.

En el análisis de la conducta vemos la mirada como una conducta, de esta manera podemos concluir que la persona que mira cuando habla con otra o cuando no mira, es un aprendizaje que se da, dependiendo de la situación, debido a un reforzamiento. Cuando la persona mira a otra es porque ha sido reforzado positivamente ya sea por la otra mirada o alguna otra contingencia dada en ese instante, la persona que no fija la mirada  a su interlocutor, si no es debido a un problema auditivo y quiere leer los labios – se debería a alguna situación pasada adversa que lo ha llevado a esquivar la mirada y se debe a un reforzamiento negativo, ya que esquiva la mirada para no recibir los estímulos adversos que recibió antes. Para superar esto lo más recomendable es que la persona mantenga la mirada cuando hable, si siente ansiedad sería bueno un entrenamiento en relajación y conductas encubiertas como autoinstrucciones positivas que se diga a sí mismo, hasta que la mirada del otro pierda  el efecto adverso que tiene.


lunes, 15 de septiembre de 2014

Leyes principios y teorías científicas en Psicología

Las leyes, principios y  teorías científicas son el  bagaje de conocimiento en que se basa una disciplina. Más exactamente, diremos que una teoría es el cuerpo de conocimiento  que conoce, describe, e interpreta la relación asociativa o causal entre eventos  de un hecho o fenómeno  aunque no siempre tenga carácter científico ni pueda ser probada, si llega a probarse se convierte en una Ley científica. En psicología existen muchas teorías que describen y explican las causas y los factores que intervienen en la  conducta humana, no todas tienen el carácter científico de la comprobación, aunque esas teorías tengan  consistencia interna, es decir, que sus enunciados sean lógicos y tengan concordancia entre sí, pero si aún le falta la  comprobación científica, quedaran aun como una teoría, incluso muchas teorías que han sido sobrepasadas por la práctica y descubrimientos que no ha podido explicar ha quedado en el olvido, como el funcionalismo. Por otra parte en la ciencia en  general se usa los conceptos de Ley y principio como sinónimos, así que no tiene sentido buscarle definiciones diferentes, sin embargo Ley y teoría son los dos conceptos máximos que imperan como constructos o conocimiento terminal en la ciencia.
De acuerdo con Kantor en su libro “Psicología Interconductual las leyes científicas y su aplicación como leyes psicológicas deben ser:
-          “Derivadas exclusivamente de los contactos  investigativos de los eventos” es decir los elementos o variables  de los eventos deben poder ser manipulados, registrados o cuantificados. Por ejemplo enunciar “La baja autoestima de un adolescente se debe a que en su infancia fue maltratado por sus padres” sería un enunciado que no nos permite llegar hasta el evento infancia y verificarlo mediante la  observación, manipulación o registro.
-          “Las leyes científicas aunque son constructos se relacionan íntimamente con los eventos”  Las leyes aunque generales siempre están vinculadas con eventos específicos, independientemente de su particularidad, porque lo que explican son eventos.  Por ejemplo: A una causa le sigue una consecuencia” esta Ley de Asociación describe el evento asociativo entre dos variables, aunque la situación de las variables sean particulares, el evento causal será el mismo.  
-          “La construcción de una Ley, es un procedimiento de interacción” es decir la Ley científica puede ser descubierta en la relación de las variables, esto implica que la teoría si no permite la manipulación y la experimentación no avanza pudiendo quedar caduca.
-          “Las leyes científicas son orientadoras” dan un norte a la investigación para nuevos descubrimientos y permite la predicción y el control.
-          “Las leyes científicas  son proposiciones descriptivas”  Son aceptables cuando las observación y experimentos validan la teoría. No solo la observación lo hace, debe haber experimentación con la manipulación de las variables, una teoría que no permite esto no avanzara y será la misma en el tiempo.
-          “Las leyes científicas deben ser sistémicas” es decir deben describir y explicar  la relación entre eventos desde diferentes ángulos de acción, como su origen, su avance, fases y resultado final en un relación unitaria.
Podemos concluir entonces que entre otras características - que no he tomado en cuenta en este articulo pero que dejo al lector para su investigación -  que una Ley científica es aquella que deriva de la investigación directa, descripción y manipulación de las variables o eventos, descubre relaciones, predice el control y es sistémica. ¿La psicología aplica leyes científicas? Teniendo en cuenta el enfoque psicológico con que se pretende describir y explicar, predecir y controlar la conducta, dependerá que las use, si trata de explicar la conducta humana desde las perspectiva del estudio de la mente como causa de la conducta se verá con dificultad para aplicar estas leyes, si por el contrario el enfoque psicológico hace uso de las relaciones que intervienen entre los factores predisponentes de la persona y el ambiente en que aprende, podrá hacer uso del método científico, sus leyes y teorías

jueves, 11 de septiembre de 2014

Miedo extremo a los lugares abiertos

La agorafobia como se le conoce a esta conducta problema consiste en que la persona teme salir sola a lugares abiertos, plazas o lugares en donde hay gran cantidad de personas, va acompañado de manifestaciones fisiológicas de ansiedad como palpitaciones, nerviosismo, sudoraciones y pensamientos del tipo “me voy a desmayar” “no puedo soportarlo” etc. En casos extremos la persona no sale a la calle, incluso estando acompañada. Visto en perspectiva el cuadro parece serio y grave, sin embargo desde la terapia de conducta es fácil de tratar salvo excepciones, con pronta recuperación, incluso siendo más efectivo que el tratamiento farmacológicos.

En la terapia de conducta se debe analizar los antecedentes y consecuencias que trae esta conducta problema, entre las consecuencias vemos que estas personas  no se exponen a los lugares abiertos, escapando de la situación o evitándola, lo que a la vez le refuerza el problema y lo mantiene.

Se debe presentar a la persona conductas alternativas exponiéndola a esos lugares abiertos, presentándose la extinción, principio que nos dice que cuando una persona es expuesta durante un lapso - que variara dependiendo del caso - a los estímulos ansiogenos (el lugar abierto) estos estímulos pierden su intensidad y su poder. Hay varias técnicas para hacerlo, como la desensibilización sistemática,  en esta, se le entrena en relajación a la vez que se le expone a situaciones  progresivas que aumentan su ansiedad, entre otras, pero no se olvide de consultar y asistir siempre al profesional indicado que puede ser un psicólogo o analista de conducta por ayuda.


miércoles, 10 de septiembre de 2014

Los sueños en el análisis de conducta

Desde la neurología el sueño es una actividad cerebral, se detecta mediante el electroencefalograma, es lo contrario al estado de vigilia y su origen aun se desconoce. ¿Qué es? ¿Por qué se produce y de la forma que  lo hace? Son preguntas que las futuras investigaciones tendrán que responder además de decirnos el porqué son accesibles solo a las personas que los tienen, sin embargo el misterio que los sueños conllevan han producido creencias en muchas personas en el sentido de que son premonitorios o vaticinan algún hecho, cosa que de ninguna manera ha sido probada.
Para el análisis de conducta  los sueños son eventos privados al mismo nivel que el pensamiento, la imaginación o el recuerdo, no se necesita saber su origen (ese trabajo le corresponde a los neurólogos, por ahora) para saber que responden a los mismos principios que rigen las relaciones entre la persona y su entorno.  Bajo este enfoque, los sueños no causan ni explican la conducta, ni son premonitorios de nada, pueden ser considerados como estímulos antecedentes juntos con los pensamientos que hablan de ese sueño, para que haya una conducta relacionada que después será reforzada. Pondremos un ejemplo para que se entienda mejor. Ante el hecho “ayer soñé con un amigo que está lejos, voy a llamarlo” muchos podrían pensar que este sueño bastaría para coger el teléfono y hacer una llamada a ese amigo que está en otra región. Sin embargo el sueño puede ser un antecedente para pensamientos del tipo ¿Cómo estará mi amigo? ¿Estará bien de salud? Lo que animaría a la persona a levantar el auricular y llamar a ese amigo que tanto se extraña. Pero dependerá de la contestación del amigo (no de un próximo sueño)  para que se repita mi preocupación y mi llamada a él, en términos de amabilidad, que su contestación denote alegría, que agradezca la llamadas que le hacemos, etc., si esto ocurre así es más probable que la próxima vez que soñemos con nuestro amigo, lo llamemos y no se deberá a que soñamos con él.


miércoles, 3 de septiembre de 2014

¿Dónde está la conducta?

Si nuestra concepción del mundo y sus problemas, explica que el  hombre sea poseedor de conductas, como un organismo que está “lleno” de emociones, sentimientos, pensamientos y creencias, y que estos digamos, eventos cognitivos explican la conducta de una persona, necesariamente se va a llegar a un punto en donde la responsabilidad y la culpa del evento conductual, recaerá sobre la persona, de esta manera decimos muy a menudo “es irresponsable” “es un  sádico” “es un psicópata” “es un niño malcriado” “caprichoso” etc. ¿Es esto humanizar a la persona? Creo que no. Si por el contrario decimos que la conducta, la responsabilidad y la culpa no están “dentro” del organismo, si no en la sociedad, cambiamos al sujeto de la culpa, del hombre a la sociedad.
La conducta per se, no es un atributo o propiedad esencial de la persona ni del ambiente o sociedad, por este motivo no está ni dentro ni fuera del organismo. La conducta es una propiedad relacional, que se da de la interacción entre el organismo y el ambiente en que desarrolla, es siempre verbo y acción.


miércoles, 6 de agosto de 2014

Practique el aprendizaje

Cuando se trata las dificultades de aprendizaje, como las dificultades de lectura,  escritura entre otras, la perspectiva conductual ayuda más que la comprensión y  explicación de las mismas, ya que se centra en la intervención directa, desde la etiología, si definimos el aprendizaje como procesos asociativos entre estímulos y respuestas que se da en una secuencia con resultados y objetivos que se demuestren de cierta forma, y que, siendo procesos con secuencias se necesita hacerlo una y otra vez hasta que se adquieran y realicen, podemos decir que los problemas de aprendizaje se deben, más que un déficit a nivel cognitivo, social o histórico, a un déficit en la práctica de esa conducta que se quiere aprender, el niño no aprenderá si no práctica lo necesario. Por ejemplo cuando el niño en los primeros años de primaria, digamos 6  a 10 años debe aprender de “memoria” la tabla de multiplicar ¿Qué implica esto? ¿Que la memoria debe aumentar con la edad y esperar que desarrolle para que se la llegue a aprender? ¿Hacer sobre la marcha y de memoria después de la pregunta  los cálculos mentales sobre los procesos de multiplicación?  ¿Practicar frecuentemente de acuerdo a cierta secuencia y orden, de menor a mayor la tabla de multiplicar?. La primera opción haría demorar mucho el proceso de enseñanza aprendizaje. La segunda llevaría a error al niño porque tendría que hacer los cálculos después de la pregunta, muchos niños que saben el procedimiento de una operación matemática fallan en el resultado por que precisamente se equivocan en multiplicar, porque lo hacen usando sus dedos o mentalmente y demoran mucho. La tercera opción permite que la práctica frecuente y la experiencia directa y repetitiva le hagan quedar los datos en su memoria, todos debemos saber de memoria la tabla de multiplicar, pero este componente cognitivo tiene siempre su correlato conductual en la práctica frecuente  y la experiencia en procesos lúdicos y directos cuando se hacen compras en el mercado o tiendas en compañía de un adulto que lo guie. Si tiene un niño que falla en la tabla de multiplicación, hágalo practicar frecuentemente, no se olvide de reforzarlo para que lo vea como divertido.

domingo, 27 de julio de 2014

Principio de Premack

Cuando los padres le dicen a su hijo “si terminas la tarea a las 4.00 podrás ir a jugar fútbol con tus amigos” es un claro ejemplo de que los padres – sin saberlo- están aplicando el Principio de Premack. Como uno de los objetivos de este Blog es que sea entendido por los legos del tema más que por psicólogos que tal vez se aburran cuando me lean, voy a definir el principio que Ud. padre de familia que me lee aplica sin saberlo- dicho sea de paso, no tiene por que saberlo tampoco. “Una conducta que se hace con mucha frecuencia de manera “libre o espontanea” puede ser usada como reforzador para que aparezca una conducta nueva o aumente una conducta que aparece de vez en cuando.

En el ejemplo indicado los padres usan el juego de fútbol de los niños como reforzador para que la conducta de “hacer tarea” se mantenga todos los días.

miércoles, 23 de julio de 2014

La intensidad del estimulo

Hay muchas leyes o principios que se aplican en el aprendizaje de conductas –ya escribiré en un próximo articulo si hay o no diferencia entre una y otra – lo que pretendo en mis artículos - y me perdonaran el atrevimiento-  es llegar explicar a quienes me leen, que la conducta humana en su mayoría, está establecida por principios naturales, no al azar ni a la voluntad, si la ciencia psicológica no nos ayuda en este intento, realmente no pasaría de ser más que una disciplina descriptiva, interpretativa y subjetiva  post facto. Una de estos principios es el de la acumulación de intensidad del estimulo que se le presenta a la persona, algunas tendrán más efectividad que otra dependiendo del organismo y su genética. La llamada “Ley de sumación” nos dice que si dos estímulos por separados no tienen la suficiente intensidad para  desencadenar una respuesta, si sumamos ambos puede llegara a ocasionar tal respuesta. Ya que permanente el organismo está en constante relación con estímulos, una forma de entender esta intensidad del estimulo en términos positivos, seria de presentar el estimulo verbal de manera tal que explique sus consecuencia, ya que en condicionamiento operante esta consecuencia es también estimulo para otras conductas. Tomando el ejemplo del artículo anterior: si un padre le pide a su hijo tender la cama después de levantarse por las mañanas y  después lavarse los dientes y cada una tiene consecuencia que no provocan respuestas en el niño, se puede sumar ambas consecuencias, digamos “si no tiendes tu cama diariamente perderás una hora de televisión diaria y si no te lavas los dientes perderás una hora de juegos de video.” Sumando ambas consecuencias la aparición de la respuesta es más probable. Otro ejemplo: si una persona está en una habitación cerrada y se le provoca calor ambiental, la persona puede soportarlo tal vez por flojera de levantarse a abrir la ventana, pero si le proporcionamos además del calor, un olor nauseabundo, es más probable que la conducta de levantarse abrir la ventana se presente más rápidamente. Como podrán darse cuenta los lectores de mis artículos y las personas relacionadas con la psicología conductual, la intensidad del estimulo así entendendida establece el reforzamiento negativo, es decir la persona tendera en lo posible hacer la conducta para evitar la consecuencias adversas. 

lunes, 21 de julio de 2014

¿Por qué se repite la petición a los niños?




En la práctica clínica de la modificación de conducta, muchos padres me preguntan en la consulta ¿Por qué tengo que repetir la orden a mi niño varias veces para que haga tal o cual cosa? ¡Nunca o pocas veces lo hace a la primera!  Les explico que es una cuestión de historia de reforzamiento, si el niño ha sido reforzado anteriormente cuando ha emitido una conducta, es más probable que realiza la conducta y la haga habitual. Ese es el primer principio, sin embargo, la instigación es necesario en niños que aun no han establecido una conducta habitual, en tal sentido la latencia es un principio que existe en aprendizaje y es la relación entre la intensidad del estimulo y el tiempo que tarda la emisión de la respuesta. Así, a menor intensidad del estimulo la respuesta demorara mas en presentarse y a mayor intensidad del estimulo en menor tiempo aparecerá la respuesta. .Ejemplo: Si un padre pide hacer una tarea al niño y este no hace caso a la primera, el padre gritara la orden a la segunda o tercera vez (fuerte intensidad del estimulo) y el niño lo hará inmediatamente (respuesta emitida). Lo negativo de esto es que puede volverse habitual esta relación y establecerse que el padre se verá reforzado  a gritar para que el niño haga las cosas y el niño se verá reforzado  negativamente a hacer las cosas, puesto que lo hará por evitar el castigo ( a menudo después del grito paternal viene la acción).

lunes, 23 de junio de 2014

Un síntoma por otro.

O como me gusta decir, una conducta por otra. Desde el punto de vista de la clínica, el síntoma es la expresión de una enfermedad, ya sea esta física o psicológica, pero tiene siempre inmerso el carácter interno del conflicto subyacente, dicen que combatiendo el síntoma, no se combate el conflicto o la enfermedad, ya que esta puede desarrollar otros síntomas, ahí es donde dicen se produce una sustitución de síntomas. Si le damos a un paciente una aspirina o una pastilla para la gripe, esta hará disminuir las molestias, pero no la gripe. El que quiere trasponer este modelo medico al psicológico muy a menudo se equivoca.. Los síntomas en psicología no se sustituyen como si fueran un grupo sistemático, en el peor de los casos aparece otro síntoma de conducta producto de un inadecuado manejo conductual. Ya que la conducta al ser un aprendizaje es normal que la persona al enfrentarse a nuevas situaciones exista una adecuación a las mismas. Este síntoma que aparece no es dependiente del “conflicto conductual”, si no de la contingencias o condiciones que la mantienen.

Caso 1. Carla es una abogada de 50 años en proceso de divorcio, este problema le provoca “ansiedad” manifestada por aceleraciones cardíacas, ruborizaciones, y  preocupación constante cada vez que habla con su esposo. La terapia de conducta le ayudo mucho en disminuir esos “síntomas” hasta desaparecer las aceleraciones cardíacas y ruborizaciones, sin embargo mostró posteriormente irritación con sus hijos ya mayores en situaciones que no podía desarrollar una de sus pasatiempos favoritos, la pintura, no había materiales y era una molestia el ir a comprar por que la tienda en donde vendían esos materiales quedaba muy alejada de su casa. Estas irritaciones permanecieron alrededor de dos semanas en donde discutía con sus familiares y daba a pie para que se siga quejando de su divorcio y que no era querida ni comprendida. Carla pensaba que esa emoción desagradable era producto de su “frustrado matrimonio” y su soledad. Se le instruyo a sus hijos que ignoraran  esas manifestaciones de la irritabilidad y que le dieran la atención debida cuando si tenía sus materiales y pintara. En Resolución de Problemas se le instruyo a Carla que comprara los materiales para largo tiempo y que no tenga la necesidad de salir de casa sin motivo, las irritaciones desaparecieron por completo para estas situaciones.

Caso 2 Jhonatan es un niño de 9 años de padres separados, que traía anotaciones en su agenda del colegio de dos a tres veces por semana porque no atendía las clases. Aunque tenía buenas notas, se decidió aplicar un programa de economía de fichas y costo de respuesta  para disminuir esas anotaciones y tenga más atención a las clases, reforzándolo con juegos en las computadoras y horas adicionales de TV. Las anotaciones disminuyeron a cero en tres semanas, sin embargo Jhonatan mostró verbalizaciones inadecuadas a su madre que nunca había hecho “eres mala madre” “tengo derechos” “quiero irme con mi papa”  cada vez que debía hacer la tarea en casa, la madre contestaba explicándole los hechos y la obligación que tenia el en hacer esas tareas. Se le instruyo a la madre que incluyera esas verbalizaciones en el costo de respuesta cada vez que Jhonatan le diga esas palabras. Y le reforzara cuando el exigiera de buenas maneras sus derechos. Esas verbalizaciones inadecuadas desaparecieron de inmediato a la primera semana y hasta la fecha no ha vuelto a presentarlas.

En ambos casos los síntomas que aparecieron después o en el transcurso del tratamiento se debieron a una adecuación y posterior reforzamiento de los familiares en el primer caso y el de la madre en el segundo caso, pero de ninguna manera  a los problemas que se trataron. La prueba empírica de esto es que manejando las circunstancias esos síntomas desaparecieron.  


lunes, 2 de junio de 2014

¿Un caso de Histeria o de Historia de reforzamiento?

Vamos hacer el análisis conductual de un caso que el Dr  Robert Liberman cita en su libro “Introducción al análisis y terapéutica de la conducta” la cita que hace el autor es de “Fragment of an Analysis of a Case of Histeria que está en el Vol3 de The Collected paper of Sigmund Freud. Aquí el caso: “Los motivos para sentirse enfermo  a menudo comienzan  a ser activos ya desde la infancia. Una niña pequeña, deseosa de recibir amor, no soporta tener que compartir el afecto de sus padres con sus hermanos y hermanas, se da cuenta de que todo su afecto se vuelca en ella cuando consigue preocuparles por que está enferma. Ahora ha descubierto  un método para atraer el amor de sus padres, y hará uso de este método cada vez que tenga a mano material psíquico para producir una enfermedad.. Cuando tal niña llegue a ser una mujer, puede que se vea contrariadas todas sus exigencias de su niñez, debido a su matrimonio con un hombre desconsiderado que no cumpla sus deseos y no le dedique su afecto. En un caso así, ella utilizara su salud quebrantada como un arma que le ayudara a mantener su posición. La enfermedad le proporcionara  los cuidados que desea, obligara  al marido a gastar su dinero en ella y mostrarse considerado como nunca lo hubiera hecho de gozar una buena salud; el marido se verá forzado a tratarla con cuidado, en caso de que se recupere, para evitar una recaída. La enfermedad tendrá todas las apariencias de ser objetiva e involuntaria, incluso el doctor que la trata será testigo de ello, y por tal razón ella no necesitara sentirse culpable por hacer uso de cierto método que descubrió ya en los años de su infancia. (pag.55). Hasta aquí el caso.
El Dr. Liberman solo dice que “Freud estaba muy consciente de la importancia de las consecuencias interpersonales de la conducta en el mantenimiento de los síntomas” es decir, de la enfermedad. Yo podría decir que en la descripción de este caso estudiado por Freud está claro y explicito (aunque el haya sido el padre del psicoanálisis)  un análisis funcional de la conducta, pero no, prefiero hacerlo paso por paso. Antes explicare para los legos lo que significó la Histeria en el pasado reciente, básicamente la Histeria era un diagnóstico en el que la persona somatizaba (transmitia o pasaba o canalizaba a su físico, a su cuerpo) un problema o trastorno psicológico, presentando de este modo una enfermedad física, que medicamente no se hallaba.
  El procedimiento que seguiré consistirá en que escribiré la cita entre comillas y después hare el análisis conductual.
1.“Los motivos para sentirse enfermo a menudo comienzan a ser activos ya desde la infancia” Ningún hecho sea este psíquico, real o material tiene la fuerza para causar un “trauma psicológico”, los hechos no aparecen para repetirse de forma determinista o por cosas del destino, sino que, aparecen y son reforzados, por eso se repiten.
2.- “una niña pequeña, deseosa de recibir amor, no soporta tener que compartir el afecto de sus padres con sus hermanos y hermanas, se da cuenta de que todo su afecto se vuelca en ella cuando consigue preocuparles por que está enferma. Ahora ha descubierto  un método para atraer el amor de sus padres, y hará uso de este método cada vez que tenga a mano material psíquico para producir una enfermedad” La niña ha conseguido la atención (afecto) de los padres de esa manera y no dudara en repetir la forma de conseguirla, los argumentos que utilice no son importantes, pueden variar de caso en caso o de situación en situación, puede ser como dice el caso, “que no soporta compartir el afecto”, pero bien pudiera haber sido otro tema como una conducta inadecuada, bajas calificaciones, rebeldía etc., cualquier cosa para llamar la atención, los padres en este caso repiten la atención a la niña por reforzamiento negativo,, es decir, le dan su atención y acuden a la niña para evitar los síntomas molestos o preocupantes de la niña, habiendo sido reforzados con la mejoría de la niña, los padres repetirán la atención a ella, reforzando a su vez positivamente la conducta de su hija.
3. “Cuando tal niña llegue a ser una mujer, puede que se vea contrariadas todas sus exigencias de su niñez, debido a su matrimonio con un hombre desconsiderado que no cumpla sus deseos y no le dedique su afecto” Al haber aprendido la niña, hoy mujer, que existe una forma que aprendió en su infancia y que le dio resultados para que le den la atención que ella necesita (todos necesitamos también) , lo hará de nuevo con los mismos argumentos, ¿para qué cambiarlos si dan resultados? Pedirá el reforzamiento (la atención de su esposo) a que esta acostumbrada, y su esposo aprenderá a su vez sin saberlo (que es diferente a inconsciente) a responder y darle la atención, que es la única manera en que su esposa mejore y no presente sus síntomas, haciéndose un circulo reforzante entre ambos que mantiene la conducta de la mujer.
4.  “La enfermedad tendrá todas las apariencias de ser objetiva e involuntaria, incluso el doctor que la trata será testigo de ello” La enfermedad o síntoma, o mejor llamémosle conducta, no solo tiene la apariencia de ser objetiva, en verdad lo es, y las condiciones funcionales  que la mantienen también los son porque le siguen en consecuencia. Involuntaria también  lo es, en la medida en que la mayoría de las personas nos comportamos de manera habitual y estamos acostumbradas a reaccionar de acuerdo a las circunstancias sin darnos cuenta de ello, ignoramos por completo que nuestra conducta está sujeta a principios que se dan en el ambiente. Esto en la mayoría de los casos se ignora completamente, pero ignorar es una cosa completamente diferente a ser inconsciente.
5. “y por tal razón ella no necesitara sentirse culpable por hacer uso de cierto método que descubrió ya en los años de su infancia”. En un análisis de la conducta y dentro del programa conductual es importante saber la historia del paciente, pero la historia de hechos que nos ayuden a comprender como se estableció el reforzamiento de una conducta, de cómo las consecuencias opera dentro de la aparición de una conducta que la mantiene y de la que es función. Pero más importante es, establecer en el análisis conductual como esta historia de reforzamiento se repite y mantiene hoy en día.


sábado, 17 de mayo de 2014

Piense en conducta

Tanto el lenguaje común como el pensamiento y sentido común nos acostumbra a  clasificar bajo una palabra: sentimientos, creencias, y actos, por ejemplo “es un aburrido”  “Es amargado”, “es débil” “Esta enfermo” “es caprichoso” “es claustrofóbico, agorafobico” etc. Este tipo de lenguaje se hace común y en cierta charla coloquial se hace entender para seguir la conversación, por otra parte en el sector de la salud, se clasifican los problemas de los pacientes bajo rótulos y etiquetas que a menudo se queda como un tatuaje en la historia del paciente, un tatuaje que es difícil borrar que lleva a prejuicio y hasta discriminación.
Como dije, mientras se manejen en el sentido común todo está bien, el problema llega cuando se  quiere tratar estos problemas, es ahí en donde el lenguaje común no ayuda mucho a la descripción del problema y al tratamiento. Lo que sugiero a las personas es que cuando se enfrenten a algún problema psicológico o tengan un familiar con quien tratar, piensen en términos de conducta, ¿qué quiere decir esto? Es ver el problema en actos, “desmenuzarlos” en unidades que se puedan ver y medir. Decir que Luisito de cinco años “hace pataletas” puede hacer pensar que el niño es tremendo y caprichoso, terco y voluntarioso, pero decir que “grita y llora hasta el suspiro cuando su madre no le compra lo que pide, que además se quiere quitar la camisa cuando su madre le niega algo en la calle y golpea con el taco del zapato para hacer bulla” me dirá en qué momento hace su “pataleta” y con quien. Una “pataleta” no puede ser observada ni medida, pero sí el lloriqueo y el grito y todo lo demás, que no me va dejar hacer suposiciones ni inferencias sobre los procesos interno  de la “pataleta” de Luisito.
Si decimos que “el señor Juan tiene pensamientos pesimistas que reflejan su triste historia amorosa, donde termino solo sufriendo” estaremos especulando y suponiendo que el pensamiento pesimista del señor Juan se debe a eso. Estos inventos y suposiciones como sabemos se debe a un aprendizaje de parte de la comunidad social que por medio del lenguaje  aprendemos a suponer y clasificar de cierta manera todos los casos, sin tener la veracidad de que su rompimiento amoroso- uno de ellos, digamos el cuarto- este haciendo su parte en el problema, la relación directa entre su cuarto amor frustrado y su pesimismo actual es por decir lo menos dudosa.
Pero si decimos que “el señor Juan tiene pensamientos pesimistas solo por las noches y cuando está acompañado de otras personas tomando café que refuerzan su conversación de desastres y mala suerte” estaríamos dando datos importantes y describiendo donde, cuando y con quien demuestra su pesimismo el señor Juan.

Para terminar, la conducta es todo lo que puede ser observado y medido en la persona, incluyendo la emoción, el pensamiento –esto ya ha sido zanjado y aceptado en psicología hace años-y el lenguaje o conducta verbal. Piense en conducta y no suponga.

jueves, 24 de abril de 2014

Aplicación efectiva de la sobrecorrección

Desde el análisis de la conducta la corrección es la modificación o extinción de la conducta desadaptativa o problema y sustituirla por una conducta adecuada o adaptativa, entonces, la sobrecorrección puede ser definida desde el ámbito conductual como una técnica que restaura los efectos ambientales de una conducta inadecuada a momentos antes de la emisión de la conducta inadecuada o alborotadora, y además, exige la realización de conductas extras y correctas al alborotador. 

La sobrecorreción se usa como un castigo benigno, para evitar la aplicación de castigos severos y sus consecuencias. Por ejemplo. Mateo tiene un episodio de berrinche o pataleta en su cuarto,  tira y arroja todas sus cosas por su habitación. Si ante la petición de su madre Mateo se calma y conversa y hace su petición de manera adecuada se habrá corregido. Sin embargo para reducir la probable emisión de una nueva pataleta, la madre  aplica la sobrecorreción, entonces le exige que ordene no solo las cosas que ha tirado en su cuarto, sino que ordene toda su habitación y barra los desechos producidos por su pataleta. De esta manera Mateo no solo sentirá el malestar de restituir el ambiente a momentos antes de su pataleta, sino que también sentirá la molestia de barrer y ordenar todo su cuarto, teniendo un efecto inhibidor a futuro,  esto se llama sobrecorreción que restituye, técnica creada por Foxx y Azrin (1972) por que restituye el  ambiente a momentos antes de la conducta inapropiada.

Una variante de la sobrecorreción es la llamada sobrecorrecion de práctica repetida que  consiste en la práctica repetida de una conducta positiva. Un ejemplo ejemplificara esta práctica, si Mateo golpea a  un compañero en la escuela, el profesor le haría disculparse no solo con la victima sino con todos los que presenciaron dicha agresión. En esta última acción de disculparse con los demás esta la acción reeducadora importante para enseñarle a Mateo que es inapropiado golpear a un compañero de clase.
Entonces tenemos dos variantes de la sobrecorrecion, la primera la sobrecorreción que restituye que busca  restituir y mejorar el ambiente a momentos antes de producida la conducta inadecuada. Y la segunda la sobrecorrecion de práctica repetida que busca reeducar al niño sin apelar a castigos o tiempos fuera.
Aplicación

Hay que tener en cuenta para aplicar la sobrecorreción que la restitución o la practica repetida debe estar relacionada con la conducta inapropiada o alborotada, sino, puede ser vista por otros y sentida por el niño como injusta, punitivo y castigador, perdiendo el sentido de la técnica. Por ejemplo si Juan en un arranque de cólera tira el pupitre del profesor no debe ni puede pedírsele que barra todo el colegio. Lo que nos lleva a entender y tener en cuenta que si la conducta inapropiada del niño o adolescente no provoca alboroto ambiental, no debe aplicarse la corrección restitutiva, pero si la practica repetida.

También hay que tener en cuenta que si la actividad que se le exige que restituya requiere mucho esfuerzo al niño que puede haber peligro de luxación o accidente es mejor ayudarlo o en su defecto evitar aplicar esta técnica.

Siendo en la practica un castigo, cierto que blando, pero castigo al fin, su aplicación se somete a los requisitos de esta técnica, es decir, su aplicación debe ser inmediata y consistente, porque al aplicarla inmediatamente se corta el reforzamiento que pudiera tener la conducta inapropiada. Por ejemplo si se exige a un niño que le ha quitado los dulces a otro, que  le devuelva y encima le dé más dulces, la queja de la víctima se corta,  esta queja puede ser reforzante para el agresor, este proceso se corta devolviéndole la risa a la victima por tener más dulce.


Nunca se olvide que la aplicación de la sobrecorrecion como cualquier técnica conductual debe ser constante y consistente con un tono de voz moderado y usando un lenguaje verbal respetuoso con el niño, sin llegar nunca a la instigación física que vulnere lo derechos del niño.

sábado, 19 de abril de 2014

Actividades que sirven como reforzadores

Una actividad divertida siempre puede servir para reforzar una conducta que se intenta  repetir o incrementar,  su eminencia o espera puede mantener la conducta que se quiere. Un estudiante puede estudiar para un examen para después irse de fin de semana, un niño puede salir a jugar futbol siempre y cuando termine su tarea, como verán sirve como reforzador. Además de servir para establecer responsabilidades en los niños y jóvenes, sirven para incrementar conductas son menos intrusivas. Y no solo en niños y jóvenes, sino en adultos sirven como autorefuerzo: un ejecutivo trabajara hasta más tarde porque después irá al bar con sus amigos a tomarse unas cervezas. Un vendedor se podrá poner un límite o tope en sus ventas para después irse de vacaciones con su familia. Para saber si esas actividades son tan reforzantes como un reforzador tangible hay que observar que actividades les gusta hacer o si no podemos preguntarles que les gusta.
Hay que tener cuidado con las actividades que pueden parecer placenteras o agradables a los niños y jóvenes por que estos pueden decir que si es agradable solo para complacer a los padres, para después dejarlos a media hacer. Si un joven acepta que se le inscriba a una clase de guitarra después de sacarse buenas notas, puede dejarlo a mitad del curso. Para evitar esto es bueno observar que es lo que hacen más seguido y les agrada, y no solamente en lo que dicen que les agrada. Si a un niño le gusta las motos, es mas que seguro que dará muestras de ellos, viendo programas de televisión, revistas de fotos, recortara gráficos de motos de los periódicos y así por el estilo.
Sin embargo puede pasar también que mostrándole una actividad nueva, la persona “enganche” con ella y empiece a gustarle. Aquí les dejo algunas actividades que dependiendo de la edad y del sitio puede aplicarse con niños y jóvenes, siempre teniendo referencia a Sulzer y Mayer (1974).

Minutos de juegos libres, tiempo para oír cuentos.
Visita al zoológico
Deportes, limpiar la pizarra, ayudar con el recojo de cuadernos
Acostarse tarde
Visita a granjas, al hospital, al parque
Tiempo de dibujos, caricaturas, gimnasio, piano
Talleres de música y deportes.
Más minutos de recreo, hacer muñecos.
Convertirse en ayudante de la clase.
Ayudar a calificar los cuadernos o exámenes.
Uso de teléfonos, radios, juguetes en clase.
Ver animales, dejar que hagan sus listas de actividades
Salir antes de tiempo, entrar después de unos minutos del recreo.
Tiempo libre en artes
Andar sin zapatos, hacer rompecabezas
Cantar, representar un acto, tocar tambor, gritar
Colorear, cortar con tijeras, jugar con tizas, plastilinas.
Jugar con agua, piscina, juego de globos.
Jugar con perros, gatos u otra mascota
Ver libros y revistas
Ir a comer, pasear en el centro comercial
Ensartar cuentas, jugar con un imán, pistolas de agua.

Para jóvenes adolescentes
Oír discos, radio, bailar, reunirse en grupos de su edad
Hablar con sus amigos,
Tiempo en clase para hacer la tarea para que las haga en su casa
No tener que hacer un examen, postergarlo
Ayudar a aprender a niños o jóvenes mas pequeños
Calificar exámenes de niños pequeños
Leer revistas para jóvenes
Talleres de música y baile en grupo
Salir de  clase más temprano
Trabajar con modelos y artesanía.
Revista de deportes, automóviles carreras
Jugar ajedrez, damas, juegos de salón
Jugar billar, ping pong y otros.





viernes, 18 de abril de 2014

Lista de reforzadores sociales

Como una respuesta a la crítica que dice que a los niños no se les debe “pagar” o darle algo por “lo que tienen o deben de hacer” los reforzadores sociales hacen lo suyo, que es el servir como reforzador al presentarse la conducta ¿Alguien podría decir que no se le debe decir ¡muy bien¡ a un niño cuando hace una conducta adecuada? Los reforzadores sociales tienen la misma función que los reforzadores comestibles o tangibles, incluso que el dinero para algunos adultos, ya que las felicitaciones de un supervisor o jefe puede ser muy efectivo en muchos casos. Los reforzadores sociales son muy efectivos  incluso en aquellos casos de conducta grave, hay mucha literatura que nos dice de la efectividad de por ejemplo: la atención,  sonreír y asentir ante un niño o persona cuando  la conducta es la adecuada. Aquí le dejo algunos que pueden aplicar a sus hijos niños y jóvenes:
Sonrisas, cosquillas
Palmadas en la cabeza y hombros.
Abrazos, guiños de ojos, besos
Señal de aprobación, ser mecida
Toque en la mejilla, ser sentado en la pierna
Comer con los niños
Asistencia
Decirle bonito, bueno, grandioso, perfecto, muy bien, fantástico
Increíble, maravilloso, excelente
Insuperable, me gusta eso ,eso es acertado, admirable,
Lo hiciste muy bien
Estoy orgulloso de ti
Eso está bien, eso fue muy amable, asentar con la cabeza
Debería mostrarles esto a tus padres (o profesora)
Te felicito
Lo estás haciendo mejor
Mucho mejor
Bue trabajo
Otros que demuestren interés y atencion
Para jóvenes
Reírse con él, reírse con el (no de él)
Sonrisas
Asentamiento con la cabeza
Guiños de ojos
Señal o gesto de aprobación
Orientar la mirada directamente al rostro
Asistencia cuando es requerida
Comentario positivo cuando hacen acto de presencia
Palmada en la espalda
Apretón de mano
Decirle: muy bien, perfecto, muy bien hecho
Sorprendente, admirable, estoy de acuerdo
Buen trabajo, fantástico, excepcional, muy bien contestado
Buena idea, fantástico
Increíble, eres creativo, innovador, continúa así
Poco a poco nos vamos a acercando
Vea como ha mejorado, usted es casi un experto en esto
Ud ha trabajado admirablemente.
Usted es muy paciente, eso es un buen trabajo
El interés que demuestra es notable
Es el mejor trabajo que he visto hoy
Lo que ha hecho es muy encomiable.
Otras que demuestren interés y aprobación.



jueves, 17 de abril de 2014

Estímulos reforzadores para niños y adolescentes

Cuando atiendo a los padres de familia que vienen a consulta y los preparo para un programa conductual, siempre les hago una pregunta clave para iniciar el reforzamiento ¿Qué cree Ud que le guste a su niño que podamos usar como reforzador? Algunos contestan sin titubear, pero la mayoría se queda pensando un buen lapso, lo que me lleva a la siguiente pregunta ¿le gustan muchas cosas? Ante la afirmación, requiero que me digan lo que más le gusta, y siguen las dudas. Les aclaro que existen reforzadores comestibles, como golosinas, reforzadores tangibles como un regalo, reforzadores sociales como ¡muy bien¡ y reforzadores de actividad como juegos etc.  Sulzer y Mayer (1975) proponen algunos estímulos reforzadores que en la práctica se usan, y puede llegar a ser atractivo  para los niños y jóvenes. Me salteare los reforzadores comestibles ya que estos pueden ser lo que le guste comer a sus niños. Algunos padres pueden intentar aplicar estos reforzadores a sus niños. Veamos algunos:


Reforzadores tangibles              
Para niños        
Muñecos
Cometas
Lápices,
Marcadores
Canicas
Libros para colorear
Rompecabezas
Cuadernos
Papel de colores
Televisión
Computadora
Juegos de play
Globos
Fichas de colores
Revistas cómicas
Silbatos
Carritos de juguetes
Skate
Insignias
Anillos de juguetes
Estrellas doradas
Globos
Notas positivas
 Otros






Para Jóvenes o adolescentes
Revistas deportivas  
Dinero
Posters
CDs
Libros de bolsillos
Llaveros
Cadenas
Cartas
Calcomanías
Insignias escolares
Ropa
Zapatos
Carteras
Juegos de maquillajes
Agendas
Diarios
Instrumentos musicales
Boletos para conciertos
Boletos para juegos deportivos
Otros














FABLA SALVAJE

  Y para cerrar esta serie de artículos que trató de síndromes psicológicos étnicos o, si se quiere llamar, de psicología comunitaria, lo ...