viernes, 7 de octubre de 2016

Practicas de crianza en la conducta negativita-desafiante en niños y adolescentes

Voy a describir los cuatro factores propuesto por el psicólogo norteamericano Barkley para explicar la conducta negativista-desafiante en niños y adolescente, ya en un excelente artículo de Portugal Fernández que puede ser encontrado en la web trata el tema, por mi parte, a  petición de algunos padres de familia que me han preguntado a que se debe el comportamiento de sus hijos, lo explicare de manera tal que pueda responder en parte a sus preguntas. Los factores que Barkley desarrolla son: practicas de crianza, característica del niño o del adolescente, característica de los padres, factores contextuales, cada tema lo explicare por separado en cuatro artículos.
Las relaciones entre padres e hijos pueden moverse en polos opuestos desde una relación intima, estable y que conlleve al desarrollo integral de los hijos, hasta relaciones complicadas, violentas, conflictivas.  Describir sentimientos  subjetivos en esas relaciones es complicado para el psicólogo, y entenderlas para la mayoría es aun más, sin embargo describiendo las conductas que se dan y que pueden ser fácilmente observables se va a una mejor comprensión de estas relaciones.
La forma que adopta las pautas de crianza, la persistencia y duración están relacionadas con la conducta rebelde y desafiante. Entre los padres y el niño existe una relación conflictiva que ha sido reforzada mutuamente, los padres refuerzan positivamente al niño  al darle lo que reclama con rabietas y este aprende que así conseguirá las cosas que desea; luego se da el reforzamiento negativo a los padres, ya que al darle al niño lo que quiere, este cesa de hacer las rabietas y con ellas, cesa la molestia de los padres quedando así reforzados, ya que para la próxima sabrán cómo hacer que el niño se calme.
Para muchos padres sus hijos son una molestia, evitan relacionarse con ellos, hay poco apego, siendo las cosas así, poco o nada sabrán ellos de las conductas adecuadas de sus hijos que necesitan reforzarse, no están al tanto de la conducta de sus hijos en la escuela, ni con sus amigos. Se sabe que los niños con conductas desafiantes en la escuela tienen padres poco preocupados e interesados en su rendimiento escolar. Los padres pueden pasar de la simple molestia a sentir verdadero “rencor” a sus hijos, esto le impide felicitar a sus hijos cuando estos tienen conductas adecuadas, relacionarse y disfrutar con ellos momentos que pueden servir para mejorar la relación. Para los padres es difícil relacionarse con el adolescente respondón, evitan hacerlo, desconociendo su conducta fuera de casa, poniendo en peligro al niño o adolescente en caer en la delincuencia, los padres parecen ignorar la conducta inadecuada de sus hijos y hasta se “acostumbran” de ello, por lo que a vista de otros padres pueden tener fama de “inconscientes”
Cuando los padres por fin quieren reforzar la conducta  adecuada de sus hijos, lo hacen con ironía, producto de la molestia de tiempo que sienten por ellos pueden decir algo como “que bien que hayas limpiado tu cuarto, estas dejando de ser el sucio de antes” que no refuerza adecuadamente y provoca que el adolescente vuelva a  realizar la conducta inadecuada. Las investigaciones dan cuenta del papel del reforzamiento negativo en las relaciones conflictivas padres e hijos vistas cuando uno u otro debe de alterarse o gritar más para poner fin a la comunicación, de esta manera se evita seguir la situación aversiva que sería la protesta del niño, o la orden, o critica de los padres. Entonces la conducta rebelde si bien es cierto puede aparecer reforzada  por llamar la atención, llega a un punto que se presenta solo para evitar la situación aversiva. Lo recomendable es cambiar estilos de crianza, una comunicación adecuada, menos situaciones aversivas y más reforzamiento a conducta adecuadas.


FABLA SALVAJE

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