La atención es el proceso que cae bajo el control
de estímulos, es una definición conductual, practica y útil si queremos
analizarla, más que la tradicional que se refiere a procesos cognitivos que
orienta, dirige y busca informacion. Para que una
persona preste atención a algo o
alguien, este algo o alguien debe tener una importancia única que nos haga
desatender los demás estímulos que existen en el ambiente. En los niños por
ejemplo, los estímulos que no tienen la cualidad de la novedad para ellos, son
pasados por alto, para los adultos la cosa funciona igual, en general la
atención cae bajo el control del lugar y la intensidad del estimulo, esto para
empezar, cuando la persona está bajo el régimen del condicionamiento atenderá
los estímulos de cuya función es la conducta de atender, para hablar más claro,
cuando la persona ya tiene una habituación a ciertos estímulos porque son reforzantes,
atenderá.
Cuando caminamos por la calle, es imposible que
tomemos atención a todos los estímulos que en ella hay, cuando manejamos el
auto, nuestra atención está en todo aquello que se relaciona con el auto, la
vía por donde vamos, aquellas personas o cosas que se acercan al auto, el
semáforo al final de la calle, la forma
misma de manejo sede a paso a la
mecánicanizacion de la práctica, hacer los cambios, apretar el acelerador
y el freno se vuelven mecánicos y requiere un mínimo de atención, la práctica
de manejar se vuelve entonces habitual. ¿Que ocurre cuando recién aprendemos a
manejar? Ahí si el conductor dirige los ojos al modelo del instructor de
manejo, modelamos sus propios movimientos, cuando hacemos los cambios,
perceptivamente seguimos el camino que
sigue los cambios en primera, segunda y tercera, nos fijamos mucho como hacemos
retroceso, esos estímulos están tomando el control de nuestra atención, porque
es novedad. Cuando ya llevamos unos meses manejando se vuelve habitual, entonces
estamos condicionados a hacerlo poniendo la atención en otros estímulos de la
calle. Imagine caminar por la calle y Ud. escucha un fuerte ruido, lo primero
en que la atención se fijara es de donde viene ese ruido y que intenso fue, Ud.
nunca preguntara ¿Por qué es ese ruido? Esa pregunta viene después que Ud. ha
localizado la fuente del estimulo.
La neurociencia en sus investigaciones nos dan
datos sobre como el cerebro procesa los estímulos, no nos da planes de acción, pero si nos ayudan
para saber cómo reacciona el cerebro ante el contexto, y lo que puede percibir
una persona en un ambiente dado, nos ayuda también a saber manejar ese ambiente
y que efecto puede tener sobre la persona. Es cierto que el enfoque mentalista
se valió mucho tiempo y aun se sigue valiendo de esto para dar su explicación
de cómo se comporta una persona, la
conducta para ellos, es el producto de los procesos del cerebro o de la
mente que se transmite y toma cuerpo y actúa. Para el análisis de la conducta
sin embargo, esta es producto de los cambios
en el ambiente y de las contingencias del refuerzo, de las cuales los
procesos mentales solo son efectos
colaterales.
Las investigaciones de la neurociencia nos dice que
los sistemas de atención están en todo el cerebro, cuando esto sucede trabaja
el lóbulo frontal y el cingular anterior y cuando cambiamos de temas o de
estímulos trabaja el lóbulo parietal derecho. Los contrastes y movimientos de
los estímulos se toman la mayor parte de nuestra atención, por eso a la mayoría
de las personas nos gusta y atendemos lo novedoso. Es interesante saber que
cuando la persona se siente amenazada de una agresión, el cerebro genera hormonas
de cortisol y vasopresina que interfiere en la atención y concentración además de la memoria, por eso,
no es recomendables las amenazas a los niños cuando estudian porque observamos
que temas que por lo general pueden
saber, bajo amenaza y golpe se les
olvidan, se bloquean y no responden.
Es muy difícil que la atención se mantenga por
mucho tiempo, la fluctuación de baja y altas como una montaña rusa es entre 90 y 110 minutos, luego el cerebro
debe descansar por espacio de 10 0 15
minutos. Los profesores en sus aulas deben manejar estos tiempos de 15 a 20
minutos de atención para los niños con
déficit de atención para luego dejar que se dispersen por espacio de cinco
minutos, exigirles es de poca utilidad, los
niños con problemas de atención deben tener este manejo. El déficit de
atención parece que están relacionados con una disminución de norepinefrina y
lo que hacen medicamentos como el ritalin solo es evitar la absorción de esa
hormona.
Los profesores en el aula y los padres en casa pueden
tener la atención de estos alumnos en un porcentaje de 40% o 50% en tiempos de
15 a 20 minutos para dejar después que se dispersen 5 minutos y retomar de nuevo la atención, esto sería
suficiente para evitarles frustraciones y problemas a los niños y evitar
así que pierdan el interese en los estudios, esto hará que logren objetivos que
le reforzaran la conducta de atender.