La persona con una personalidad ansiosa (evitativa) en el ámbito laboral

 

El patrón general de esta personalidad es la inhibición social, el retraimiento y el aislamiento, la personalidad evitativa está en el CIE 10 como trastorno ansioso de la personalidad, F60.6.  Este trabajador evitara las relaciones interpersonales por inseguridad de no agradar a nadie o exagerando peligros que no existen, tendrá miedo a la crítica, sentimientos y creencias de que es inferior a los demás, son hipersensibles a la crítica y a la desaprobación.

A diferencia de la persona con personalidad esquizoide o esquizotipica, el aislamiento para la persona evitativa es molestoso y perturbador, quiere juntarse o reunirse con persona, pero su inseguridad se lo impide, al contrario del esquizoide que busca su aislamiento sin problemas, el evitativo no lo busca, lo encuentra como forma de escapar de la ansiedad que le da la inseguridad y su sensibilidad a la crítica o el rechazo. En el trabajo están a la defensiva ante los compañeros para evitar el rechazo, pueden evitar socializar con los compañeros, así que no es raro que se escapen a menudo de reuniones de cumpleaños, aniversario de la empresa o algo más menudo como reunirse para almorzar diariamente, prefieren comer y andar la mayoría del tiempo solos.

 

¿Qué hacer?

 

Como los dependientes, los evitativos son indecisos y parece que están tensos y ansioso, aunque la ansiedad viene cuando no están seguros de estar con gente que le dé seguridad, dan la impresión de que están cansados fatigados, puede ayudar para el cumplimiento de su trabajo definir bien sus funciones procedimientos y objetivos, pueden desempeñar sin problemas labores de almacén, oficina con pocas personas, pero no se desempeñaran bien como relacionistas púbico ventas o cualquier puesto que exija trato directo y franco con el publico.

La persona con una personalidad dependiente en el ámbito laboral

 

El patrón general de esta personalidad es la sumisión, la indecisión y la dependencia.  Si ve Ud un trabajador del tipo dependiente lo vera alejarse de tareas y trabajos nuevos, estará tranquilo con labores ya conocidas y sin mucha carga, en caso no logre esa estabilidad y dependencia, este trabajador estará ansioso, fatigado y con sensación subjetiva de cansancio. Le costara tomar decisiones por lo que los objetivos de la tarea se retrasaran por indecisión del trabajador, perjudicando a la empresa si así es el caso. Los trabajadores dependientes necesitan que otros dirijan y asuman responsabilidades que  ellos no pueden tomar, son confiados con los otros pero a la vez indecisos con sus propias decisiones e inseguros, temen equivocarse y buscan constantemente aprobación de sus compañeros .

 

¿Qué hacer?

 

Ayudarlos y guiarlos solo reafirmara sus propias opiniones de ineptos e incapaces que tienen de sí mismo. Hay que evitar la relación intensa y personalizada que nos obligan los dependientes, evitando el rechazo y con mucho tino debemos de incentivar que hagan trabajos simples en donde tomen pequeñas decisiones y reforzarlos en ese momento de toma de decisión. Pueden trabajar en labores de equipo si no tienen el mando, y son dirigidos, no son tan buenos dirigiendo oficinas o administrando personal. Los reforzamientos funcionan mejor cuando los trabajadores dependientes siguen procedimientos que pueden estar explícitos o escritos, se le supervisa que cumpla los procedimientos, más que ayudarlo directamente, esta supervisión y reforzamiento debe venir de sus compañeros y supervisores para completar el circulo de ambiente que debe tener para evitar conflictos de dependencia con unos sí y con otros no.

La persona con un trastorno anancastico en el trabajo

 

 

El patrón general de esta personalidad es el orden y la perfección, así que si Ud. ve a un trabajador recto y moralista al extremo puede que este frente a un anancastico o a un obsesivo compulsivo que es como también se le conoce. Siguen las normas de manera rígida, sin contemplaciones ni dejar pasar nada al azar, no son espontáneos, son inflexibles con los reglamentos. Estos trabajadores son muy incisivos y quieren llegar hasta la perfección, no dejan lugar a la creatividad y son muy pegados a la letra, cuando la situación en donde se mueven, dejan la cotidianidad se muestran ansiosos y preocupados. Hacen juicios muy críticos de las personas y situaciones, incluso de las normas, las que cumplen sin decir nada y con dureza. Pocas veces perdonan y olvidan. Si son jueces o jefes pueden llegar a ser verdaderos tiranos, aunque eficientes trabajadores y productivos a costa de los demás, a nivel administrativos son buenos, pero en las interrelaciones personales con sus subordinados, son vistos como abusivos y muy “duros”. Su emoción es muy rígida, pocas veces se le puede ver relajado, prefieren la seguridad de lo cotidiano, de lo siempre a la inseguridad de lo imprevisto ante lo cual, les cuesta mucho organizarse de nuevo.

 

Hay que tener en cuenta que este comportamiento les lleva a tener mucha dificultad con las demás personas que no son como él, a quienes puede mirar como indisciplinados y hasta inmorales.  Pueden ser causante de grandes conflictos en el ambiente laboral.  El trabajador con esta personalidad debe evitar la ansiedad y para esto puede hacer conductas y tener pensamientos que ayuden a calmar la ansiedad, por ejemplo, en conducta puede realizar comprobaciones constantes de documentos o procedimientos antes de entrar a otro nivel del protocolo demorando el cumplimiento de objetivos o tareas. En el pensamiento puede ser rígido y hacer rituales como rezar y contar para calmar la ansiedad, evitar lugares relacionados a su ansiedad, Puede tener problemas de relaciones interpersonales, y comportarse de manera diferente con los empleados o subordinados y con los jefes o directores, siendo más autoritario con los subalternos y empleados y sumisos con los directores y jefes.

 

 ¿Qué hacer?

 

Son buenos administradores y como en ocasiones son felicitados por cumplir con los objetivos esto le refuerza más su trastorno. Pueden trabajar en oficinas y ser administradores de personal, logística etc., pero tendrán problemas de relación interpersonal y abusos si los empleados se quejan, cuando presentan conductas obsesivas o mejor es dejarlos que lleguen a la comprobación de sus rituales para calmar su ansiedad, evitar las discusiones con él sobre el cumplimiento de normas y reglas laborales porque siempre querrán salirse con la suya, hay que tener tino para observarle sus excesos ya que te verán como empleado irresponsable. Es aconsejable marcar y poner límites al trabajo y tareas, que las cosas y reglas sean claras para evitarle ansiedad y sus rituales.  Como las personas con trastorno limite pueden necesitar medicamentos lo cual facilitaría sus relaciones laborales, proporcionarle los ambientes adecuados para tomarlos.

La persona con trastorno de personalidad limite en el ámbito laboral.

 

El patrón general de estas personalidades es la inestabilidad en sus relaciones interpersonales y sus afectos, son impulsivos, temen el abandono por lo que pueden ser sumisos un tiempo e impulsivos en otros, puede establecer elaciones amicales por un tiempo y luego romperlas fácilmente, pero no sin sufrimientos. Sus afectos van de los extremos a idealizar a la persona afectiva hasta odiarla. Su impulsividad les juega una mala pasada en el sexo alimentación y valores hasta drogas que pueden ser consumidas en el trabajo, puede hablar de sentirse vacío, puede manifestarse irascible ansioso y puede llegar hasta las peleas. Son personas que pueden dar la impresión de tener un comportamiento caótico y desorganizado, impredecible casi sin saber que esperar de èl inquieto y conflictivo.

Terminar un trabajo profesional les resulta difícil y pueden llegar a tener éxito con mucho esfuerzo, puede requerir cambios constantes de puestos de trabajo, al sentirse vacíos y en ocasiones con la imagen de identidad alterada sus intereses laborales y profesionales se ven afectados. Se estresan fácilmente y son vulnerables a la critica.

¿Qué hacer?

Hay que tener mucho tacto para tratar con estos trabajadores, el líder de grupo debe lidiar con la inestabilidad emocional caótica y constante - irónicamente – de este trabajador, que no es malo por serlo, sino que por su trastorno puede parecer que no le importa nada y no tiene control. Para apaciguar su influencia en el ambiente laboral de estos trabajadores se le debe de marcar bien cuáles son sus funciones y objetivos esperados, sus compañeros, así como sus jefes deben tener paciencia y esperar sus exabruptos, no se hagan muchas ilusiones con ellos, es una personalidad difícil de llevar. Nuevamente, las labores remotas y la comunicación virtual puede ser una buena forma de relaciones para marcar y señalar las tareas laborales.  

La persona antisocial en el trabajo.

 

El prefijo antisocial no debe confundirse con evitar lo social, odiar lo social, ser sumiso, aislado, ser poco sociable, no asistir a las reuniones sociales como cumpleaños del personal o agasajos dentro de la empresa, el patrón de comportamiento del antisocial es que no respeta las normas sociales y se aprovecha de las situaciones para sacar provecho personal en perjuicio de los demás sin sentir sentimientos de culpa.

Son trabajadores que pueden presentar estas características de personalidad:

-        Hacen conductas que provocan intervención policial.

-          Pueden engañar o estafar a las personas para sacar un provecho personal o por placer.

-          impulsivo, irritable en ocasiones frecuentes agresivos, imprudentes en la seguridad,

-          Irresponsables con los encargos laborales, falta de remordimientos.

Como ya se dijo en un artículo anterior, los trastornos de personalidad tienen características que se comparten entre ellos, y en el antisocial estos se cumple hasta la exageración, por ejemplo, pueden tener ideas de ser grandiosos y de merecer todo como los narcisistas, pueden tener conductas exageradas para conseguir sus objetivos. como llorar ante las autoridades para no ser castigados – pero es solo una actuación. Pueden ser empleados que originan conflictos laborales muy seguidos por que engañan y hasta estafan a sus propios compañeros de labores, puede ser acosadores o causar estrés fácilmente a los demás trabajadores, pueden incluso poner en riesgo la seguridad y protocolos de acción en alguna labor ya que ellos gozan con el peligro y se saltan las normas, sin contar que el consumo de drogas y alcohol puede ocasionar que se llegue al trabajo con síntomas de estas sustancias.

 ¿Que hacer?

Cuando el trastorno es leve pueden llegar a ser buenos trabajadores en puestos que conlleven retos y que sean estimulantes como ascensos en línea de carrera y no tengan como requisitos cumplir o seguir protocolos, por ejemplo, trabajos de publicistas donde fomenten la creatividad. Cuando es grave puede hasta perder el trabajo.

Cuando el estrés es fuerte pueden reaccionar con impulsividad o conductas ofensivas para con los compañeros de trabajo incluso hacia el jefe, lo mejor sería dejar que exprese sus emociones verbalmente antes que físicamente. Son personas difíciles y casi no dejan ayudar de forma continua, cuando hay oportunidad el aprendizaje de control de los impulsos les sirve para evitar citaciones policiales y problemas laborales.

La persona con un trastorno de personalidad narcisista en el ámbito laboral

 

En el CIE 10 el narcisista está en el apartado F.60.8 Otros trastornos de personalidad específicos y debe utilizarse cuando la característica de la persona no se enmarca dentro de los otros ya clasificados, pero por sus síntomas observables el narcisista nunca pasará desapercibido y siempre se hará notar, por eso lo ponemos como entidad práctica reconocida y que puede irrumpir en escena ocasionando malestar y mal ambiente laboral, veamos pues algo de esta emotiva y dramática personalidad.

Su patrón habitual de comportamiento es que son personas grandilocuentes en pensamiento y conducta, se dan una gran auto importancia – más de lo normalmente debemos darnos – viven en un mundo de exageraciones en donde solo ellos tienen importancia y rasgos que deben admirarse. Puede Ud. ver a un empleado explicando “cómo le fue después de una función de teatro, contando como los actores se alegraban de verlo cuando él les pidió tomarse una foto y cosas por el estilo, y que por esa razón el jefe o director de su empresa debe de tener cuidado en como lo trata o como le pide algo” . Exageran sus títulos y sus acciones, exigen ser admirados y en lo posible pueden enojarse cundo no son tratados con ciertos privilegios que creen merecer, porque no solo es que dicen merecer algo, sino que precisamente lo creen.

Es arrogante y soberbio, envidia a los demás y cree que los demás lo envidian a él, puede ser explotador si es jefe de una compañía, tiene poca empatía y no se interesa en el bien de sus empleados, o de sus compañeros, o de sus jefes, puede tutear al dueño de la compañía incluso si es la primera vez que lo ve y tomarse aires de derechos con él. Puede aprovecharse de los demás, aunque se diferencia con el psicópata en la intensión, mientras el psicópata puede aprovecharse de ti y sacarte algo concreto u objetivo, el narcisista puede sacarte un halago y con eso ya está” complacido”, hecho que no quita que pueda sacar de ti provecho de objetos o cosas tangibles.

¿Qué hacer?

Como necesitan atención por parte de los otros pueden ser empleados que en trabajos en solitario se aburran y no sean tan eficientes, ya que necesitan de reforzamiento continuo puede trabajar mejor en grupo que individualmente. Si se les quiere observar un error, deben de ser asertivos con ellos y decirle con total veracidad comprobada e impersonalmente los hechos, pero con mucho tacto y calma para que no tomen a mal las cosas. Pueden reaccionar con humillación vergüenza y mal humor ante las criticas

No se manejan bien en atención al cliente por la interacción social, se manejan bien con un líder empático y asertivo. De forma práctica las instrucciones pueden ser dadas como retroalimentación o feedback y en conversaciones en grupos en donde haya un narcisista, el minimizar las grandes acciones y sus consecuencias en general, en forma de opiniones, será una buena forma de guiarlo a una visión menos emotiva y grandilocuente de las cosas.

No insistir en las conversaciones o explicaciones en donde él cree que se necesite personas especiales para entender su problemática, es mejor cortar la comunicación de manera empática y sutil.