Antes de contestar que
método de estudio es el indicado para tratar al hombre, se debe de responder
primero cual es el objeto de estudio de ese hombre, además de definir, si
queremos estudiar al hombre como una
totalidad, es decir como organismo y mente,
o en partes, como puede ser
emocional o cognitivamente; también debemos definir si queremos analizar al
hombre dentro de un enfoque sistémico o como ente individual independientemente
del ambiente. ¿Podemos hacer un reduccionismo de la multidimencionalidad humana?
o en su defecto podemos - si así se lo
enfoca- hacer una inducción de su particularidad. ¿Hemos inducido a lo
factorial, la simplicidad del ser humano complicándonos su conocimiento? Parece
que algunas teorías psicológicas están basadas en una o en otra propuesta.
La dimencionalidad
humana se expresa en las relaciones sociales, en las diferentes facetas de esas
relaciones, el hombre es teológico, filosófico, religioso, materialista,
social, económico y político, la psicología como ciencia encargada del estudio
de la conducta y de la mente del hombre, se proyecta en esas relaciones
sociales subordinando el contenido de esas áreas a su acción, en otras
ocasiones son estas áreas las que inundan con su contenido filosóficos o teológicos
la dinámica psicológica. Es interesante observar y analizar cada una de las
relaciones que la psicología tiene con algunas disciplinas o facetas del ámbito
social y como se esclarece con la experiencia las influencias que se ejercen
mutuamente. Algunas se interponen entre ellas, dependiendo de la fuerza teórica
o creencias arraigadas de la persona o su grupo social, influyen de tal manera
en su psicología que superponen sus
principios a ella, en algunos casos, la psicología de la persona no se ve afectada por las otras disciplinas,
ya sea porque sus intereses no son los mismos, o el objetivo de estudio es otro.
Aun así, siendo la psicología inherente al hombre, las relaciones sociales se
verán identificadas con ciertas clases de creencias que las predispondrán a
relaciones positivas o negativas según sea el caso y las circunstancias.