viernes, 29 de noviembre de 2024

Mal humor

 

En los andes de nuestro país el mal humor es otro síndrome, aunque  menor que la colerina, que presenta enfado y disgusto, y es considerado más peligroso que la colerina, debido a su carácter permanente. El mal humor convierte a la persona tranquila en un energúmeno, rencorosa y resentida. El Dr. Delgado en sus cuadernos de medicina tradicional nos refiere que el desaliento, el agotamiento físico, el pánico, el terror, el recelo, la avaricia y la envidia  convierte al hombre en irritable, colérico, potencialmente un maltratador hasta llegar al asesinato. Creen que puede tener un origen mágico. En Huamanga, por ejemplo, se cree que el mal humor aparece después que la persona ha tenido un sueño malo con una persona de mala suerte, que causa irritabilidad y enojo por todo. En Andahuaylas el mal humor puede ir acompañado de problemas estomacales como dolor y diarreas.

No aparece en el CIE 10 referencia a este cuadro afectivo, aunque podríamos colocarlo como trastorno del humor o del estado de ánimo.

martes, 19 de noviembre de 2024

Colerina

 

Hay casos en los que la persona tiene arranques de ira, agresividad y conducta que ha llegado a veces hasta el homicidio de su familia o de extraños en la calle y hasta el suicidio, y esto sin motivación aparente o acaso el motivo o la provocación ha sido de poca importancia o de poca intensidad, pero que han ocasionado que la persona reaccione de manera muy violenta. Puede estar seguido de olvidos, amnesia y cansancio extremo.

Estudios confirman que la persona ha estado previamente sujeta a estrés o situaciones de ansiedad o de hostilidad.

Este comportamiento es conocido en los Andes de Perú, Colombia, Ecuador y Bolivia como "colerina".

En cuadernos de medicina tradicional, el Dr. Hugo Delgado Súmar nos dice que la colerina surge de la cólera, furia y de la impaciencia (Haucha), debido a insultos, ofensas, humillación y abuso. Como forma de impotencia ante el maltrato.

Estos síndromes psicológicos también vienen acompañados de síntomas físicos como náuseas, vómitos, amargor de boca, ictericia y fiebre. En Ayacucho se le llama Colerina o Cólera. En Cajamarca se le conoce como cólera. En Huamanga se le conoce como colerina y a menudo está asociado a encuentros violentos o disgustos familiares y se siente como una “bola en el estómago”, sofocación y en ocasiones pérdida de conocimiento.

En Jauja, Huancayo, la colerina se ve más en mujeres y se manifiesta, aparte de los síndromes psicológicos, como que el cuerpo está “deshecho”, fiebre y vómitos.

Se cree que cuando la cólera se guarda y no se expresa en su momento, se puede agravar con el frío o el calor, además de cuando se come ají, sal o alcohol.

El Dr. Delgado afirma que los Aymaras de Puno consideran que la colerina puede ser causada por el frío o el calor, sin mediar otra causa previa.

El CIE10 sugiere poner el diagnóstico en Otros trastornos de la personalidad y del comportamiento del adulto.

 

sábado, 16 de noviembre de 2024

Síndromes psicológicos étnicos.

 

 Hay síndromes psicológicos en cada etnia o cultura, que se complica insertarla en las clasificaciones de salud mental que existen en la actualidad. Cada etnia o grupo cultural maneja su propio sistema de valores, y como no, también formas de manifestar sus trastornos mentales. Según el sistema de Clasificación Internacional de Enfermedades CIE 10, para algunos investigadores no son más que otras formas de manifestación de los trastornos psicológicos que hay en el CIE 10 y que solo difieren de ellos, en tanto duración e intensidad.

Aunque hay síndromes universales que se dan en todas las culturas, como, por ejemplo, la esquizofrenia; hay otras como la depresión, que en una cultura puede expresarse como reacción grave al estrés, y en otras es considerada como una forma grave de salud mental. En algunas sociedades como en la China, el sentimiento de culpa no es muy común. La sensación de felicidad para los budistas está alejada de las cosas materiales, mientras que para los musulmanes la tristeza y la muerte pueden significar un acercamiento religioso a su dios.

El conocimiento de una psicología transcultural nos ayudará a identificar trastornos específicos de determinadas culturas parecidos a los síndromes que se conocen en los sistemas de clasificación como el CIE 10 o el DSM IV. No es necesario saber la psicología transcultural y antropológica de todas las culturas del mundo. Es suficiente para la práctica cotidiana el conocimiento de las etnias más cercanas al territorio de nuestro ámbito de trabajo. La perspectiva psicosocial nos ayuda en este sentido, no solo para saber cuáles podrían ser las supuestas "causas sociales" de la conducta anormal, sino para conocer como el grupo social influye en la aparición y el mantenimiento del síndrome.

Las personas de etnias no son muy asiduas a las terapias psicológicas y cuando sienten que tienen síntomas de algún malestar emocional o del pensamiento van a la persona que son más afines a su cultura, como algún chaman o curandero, etc., que maneja sus mismas creencias y no se pierden en largas y complicadas explicaciones sobre las causas de su problema psicológico Por eso es importante saber la diferencia y la semejanza de algunos síndromes y sus manifestaciones culturales para poder encuadrar en lo posible los síntomas en los trastornos que ellos pueden conocer.

Vamos a subir una serie de síndromes psicológicos que aparecen en algunas culturas del interior del país y relacionarlos en lo posible con las que nos indica el CIE 10 y el Ministerio de Salud mediante el Instituto Nacional de Medicina tradicional.

 

 

 


FABLA SALVAJE

  Y para cerrar esta serie de artículos que trató de síndromes psicológicos étnicos o, si se quiere llamar, de psicología comunitaria, lo ...