Entiendo que la religión
forma parte de las fases de pensamiento y creencia que explica la cosmovisión del mundo y que describe a su
vez la
evolución del pensamiento humano a lo largo de su historia, las otras
dos son la magia y la ciencia. Así, magia, religión y ciencia son los tres
sistemas de pensamiento que explican la evolución cognitiva del hombre desde el
homo sapíens hasta el homo videns.
La religión es una creencia
diversificada, es decir, hay muchas religiones, pero sin embargo desde la fe
occidental nos han enseñado que existe un solo dios omnipresente, atemporal,
infinito y eterno, no ha nacido ni va a morir, vence a la muerte, pero en otras
culturas los dioses mueren, en otras, nacen como hombres y mueren como dioses, lo
antropoformizan, le dan cualidades humanas, y los matan.
La religión a diferencia de
la magia nos enseño que la vida tiene sus límites, en todas partes y cultura la
magia siempre antecedió a la religión,
en el pensamiento mágico todo era posible, hasta la vida eterna y la manipulación
del cielo y de la tierra, pero su imperio le puso límites al hombre, le enseño
que era frágil, limitado y que su vida tiene fin con la muerte, la imposibilidad
de lo eterno se refugió en la religión y en los dioses que creo, hay culturas
en donde han creado dioses que mueren. Pero no estamos tratando de la sentencia
de Nietzsche “Dios ha muerto”, esa occisión del Dios cristiano es otra clase de
muerte originada –según él - por la indiferencia y la hipocresía del mismo
cristianismo que no alcanzo la talla del mismo Jesús. Este Dios ha muerto por
la falta de valores, la muerte de los dioses tribales tiene una funcionalidad
de renovación y sobrevivencia como nos
describe Sir James Frazer en su hermoso libro “La Rama Dorada” allí describe
que en los pueblos tribales de Groenlandia creen que un viento fuerte puede matar
a su dios, y cuando se enteraron que el dios cristiano no moría dijeron que de
verdad debía de ser un “grandísimo dios”. Los indios norteamericano creen que
el gran espíritu que hizo el mundo ya está muerto.
En muchos casos los pueblos
tribales ubican el lugar exacto en donde está enterrado su dios, en una tribu
filipinas decían a los conquistadores españoles que el sepulcro del creador
estaba en el monte Cabuniano. El dios
Heintsi –eibib de los Hotentotes vive y muere varias veces y su tumba esta en
los linderos angostos de la montaña. Los griegos creían que la tumba del gran
dios Zeus estaba en Creta, y el cuerpo de Dionisos estaba en Delfos junto a la
estatua de Apolo y en su tumba dice “aquí
yace el cuerpo de Dionisos hijo de Semele”. Hasta el gran dios Cronos dicese
que está enterrado en Sicilia. Y los sepulcros de Hermes Afrodita y Ares fueron
descubiertos en Hermópolis, Chipre y
Tracia.
Los dioses egipcios, aunque
tenían cuerpos más etéreos, solo duraban un tiempo en vida y también morían y
reinaban en el más allá a los hombres muertos y sus almas. Sin embargo el descubrimiento de la técnica del embalsamar les daba una chance
más en la tierra para que sus cuerpos no se descompusieran. Cada provincia egipcia tenía su tumba y su momia propia. Plutarco narra la
historia de la muerte del dios Pan que en Asia menor lo conocen como Tamuz o
Adonis, cuya muerte era llorada cada año por los griegos así como en Siria su
tierra natal.
Muchos dioses y “hombres
dioses” están ligadas a la supervivencia, a la cosecha y la fertilidad de la
tierra, acontecimientos que van en paralelo con el inalterable paso del tiempo
de la vida del dios que se hace viejo y hay que reemplazarlo, así ocurría en
tribus africanas en donde reyes dioses se creían inmortales y que fueron asesinados por el pueblo una vez que perciben
que su poder se pierde por ser viejos y
la fertilidad de los cereales no son los mejores, su muerte entonces se hace necesaria
y el futuro occiso lo sabe y lo acepta, ese es el pacto de vivir todo un año
como un dios para después dejar esta vida a un sucesor que le dará bienestar a
su cosecha, es mas, la muerte debe ser violenta para que sea funcional y sirva
a la causa del pueblo, los Mangainos tribu de la islas Cook en el Pacifico Sur
creen que la muerte natural es causada por un espíritu débil y en cambio una
muerte violenta es deseable por el alma fuerte y guerrera.
Hay muchos pueblos en el
mundo, cada una de ellas cree en un dios, rey o manifestación de la naturaleza,
el pensamiento científico pertenece a una elite aun no lo suficientemente
ponderada, pero no podemos dejar de lado el pensamiento religioso, la segunda
fase del desarrollo del pensamiento humano, más todavía, si millones de
personas creen aun en la magia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
haz tu comentario aqui